Este caché forma parte de la serie dedicada al
Románico en Cantabria. Con esta serie pretendo dar a conocer
la riqueza artística que este estilo tiene en el norte de la
península, y mas concretamente, en Cantabria. A continuación, os
presento la Iglesia de San Cipriano, una auténtica
joya enclavada en el Valle de Campoo, cuya rotunda
expresividad en materia erótico-sexual trasciende de la función
instructiva y moralizante del arte románico.
ARQUITECTURA
Su templo sigue fielmente la línea de la
Colegiata de San Pedro de Cervatos; aun cuando en proporciones y
decoración mucho más modestas. Datable también en el siglo XII
avanzado.
Es templo de nave única, a la cual se añadieron en época posterior
sendas capillas laterales adosadas al presbiterio. De la misma
época debe datar la alta espadaña exenta, que continua la línea de
fachada del hastial de poniente, al que se adosa.
Es un templo de nave única y de proporciones
modestas, a la cual, se añadieron en época posterior sendas
capillas laterales adosadas al presbiterio que alteran notablemente
la pureza románica de San Cipriano. De la misma época debe datar la
alta espadaña exenta, que continua la línea de fachada del hastial
de poniente, al que se adosa.
La portada se abre, a semejanza de Cervatos, en
un cuerpo avanzado en mitad del muro sur, y asimismo está
flanqueada por dos ventanales. Consta de tres arquivoltas; de
arista la intermedia y de bocel las exteriores. La más interior
apea en sendos capiteles, que representan un águila y una pareja de
leones.
ESCULTURA
La última arquivolta es peraltada en exceso,
produciendo una notable incongruencia con el arco de medio punto
del vano.
La ventana de la cabecera del muro sur, consta de una arquivolta
rehundida, de bocel, con decoración de bezantes por fuera de la
misma. Apea en dos capiteles, deteriorado el de poniente, que
constaba de leones superpuestos. El oriental posee un águila de
factura muy simple.
La ventana occidental, posee una arquivolta
rehundida, sin ninguna decoración.
Los canecillos bajo el alero de este templo,
también reflejan la obra del maestro de Cervatos. Buena parte de
ellos están tan desgastados que apenas se distingue su
temática.
Hay una pareja de canecillos contiguos, bajo el
lado norte del alero bien conservados y explícitos que hacen
referencia al pecado, especialmente la lujuria o la gula. Varias
cabezas de machos cabríos nos hacen sentir la presencia constante
del pecado.
En la representación femenina, se observa la
postura de talones tras las orejas, como en Cervatos. En la
representación masculina, (itifálico), ha perdido una porción de su
desproporcionado atributo.
En la fachada sur del templo, bajo los
canecillos, hay empotrada una alargada escena toscamente tallada en
la se representan dos animales.
En el interior tiene interés el retablo obra del
prolífico artista campurriano: Manuel García Bayllo y que data de
1754.
Os recomiendo seguir visitando el resto de iglesias y colegiatas
que forman parte de la Serie del Románico en Cantabria.
Buena Suerte y Feliz Geocaching !!!
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