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Jardines de Colón y Palacio de la Merced. Traditional Geocache

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Alaguait: Gracias por su contribución al Geocaching.

Alaguait
Revisor voluntario de Geocaching

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Hidden : 2/19/2017
Difficulty:
1 out of 5
Terrain:
1 out of 5

Size: Size:   micro (micro)

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Geocache Description:

Este caché nos lleva a un pequeño pulmón de nuestra ciudad, acercándonos a uno de los centros políticos (Diputación Provincial) que a la vez es un Palacio de la Merced. Será necesario mucha discreción al recoger y depositar el caché, que se encuentra en una zona muy transitada.

JARDINES DE COLÓN Y PALACIO DE LA MERCED
Situados en la céntrica plaza Colón, se les conoce también como Jardines de la Merced ya que a esa zona de la ciudad se le llamaba antes Campo de la Merced por la proximidad con el convento de la Merced (actual sede de la Diputación de Córdoba).

Fuente de los Jardines

Morabito
Además de una variada flora, los jardines tienen una fuente en el centro, a la que confluyen todos los caminos y junto a la que hay una pequeña mezquita conocida como El Morabito. En dos de las esquinas del parque hay situados sendos colegios: el C.E.I.P. Colón y el C.D.P. Ferroviario.
Historia
Hasta 1831, hubo en el Campo de la Merced una plaza de toros, el Coso en el Campo de la Merced. En 1835 el Conde de Torres Cabrera, alcalde de la ciudad, propone convertir el Campo de la Merced en un paseo. Se pusieron los cimientos de la fuente, pero no llegaron a realizarse. Los jardines se construirían a principios del siglo XX, según el proyecto firmado en 1905. Los jardines fueron remodelados en 1994. La fuente es obra de Rafael del Rosal, según el proyecto Carlos Sáenz de Santamaría. De estilo modernista, se construyó en los años 1920. Durante la Guerra Civil se construyó en el parque una pequeña mezquita, para las tropas procedentes de África, el Morabito. Quedó después sin uso, hasta 1992, en que el ayuntamiento, a través de un acuerdo, la cede a la Asociación de Musulmanes de Córdoba, como centro de culto y de reunión Palacio de la Merced (Córdoba)

Fachada principal del Palacio de la Merced
El Palacio de la Merced, antiguo convento de la Merced Calzada, es la sede de la Diputación Provincial de Córdoba, en Córdoba (España). Antiguo convento de la Merced Tradicionalmente el origen y fundación de este convento va unido a la figura de San Pedro Nolasco, a quien el rey Fernando III de Castilla donó la basílica de Santa Eulalia tras la conquista de la ciudad. El edificio ha sufrido numerosas transformaciones desde su fundación. El conjunto actual es obra del siglo XVIII, aunque reformado en 1850, cuando fue destinado a hospicio, y en 1960, para adaptarlo a sede de la Diputación Provincial, adquiriendo su actual fisonomía bajo la dirección del arquitecto Rafael de la Hoz Arderius. En enero de 1978 la iglesia sufrió un gran incendio provocado por un demente que destruyó el retablo mayor y todos los enseres que la adornaban. Actualmente se procede a su recuperación, a expensas del citado organismo. El Antiguo convento de Nuestra Señora la Merced está declarado Bien de interés cultural en la categoría de monumento desde el año 2008.1 Antiguo lugar sagrado En las excavaciones realizadas para construir el garaje entre los años 1973-1974, aparecieron restos de una construcción de sillares romanos que aportaron abundante cerámica aretina del tipo H 8. Con anterioridad habían aparecido restos de un baptisterio y de una cripta, que fue identificada con la de Santa Eulalia. Algunos historiadores han pensado que se trata de una construcción visigoda de la época de Recaredo, si bien no se descarta la posibilidad de que pudiera ser de época paleocristiana. De la piedad medieval a la magnificiencia barroca

Claustro principal
Del convento construido en el siglo XIII no se ha conservado resto alguno, aunque se sabe que se encuentra ubicado en el mismo lugar en que se fundó. Testigo del esplendor de la institución en estos siglos es el Cristo de la Merced, importante pieza de finales del siglo XIV, relacionada con los crucificados castellanos. El edificio actual es una obra del siglo XVIII, ignorándose hasta la fecha los autores que intervinieron en la estructuración del conjunto. En cambio sí se puede afirmar que en su construcción hubo dos fases. La primera corresponde a los comienzos del siglo XVIII, cuando se construye toda el ala septentrional, es decir, el claustro secundario y dependencias anejas. De ellas sólo se han conservado el patio y la escalera. Esta última fue financiada por el cardenal Salazar y la hizo Francisco Hurtado Izquierdo. Su traza guarda estrecha relación con la escalera secundaria que el citado maestro realiza por esos años para el Hospital del Cardenal Salazar. En una segunda etapa se acomete la construcción de la iglesia, el claustro principal, la escalera y las dependencias que lo rodean. Se transforma también la fachada exterior del convento, dándole al conjunto la mayor conjunción y unidad. Este queda así constituido por un gran rectángulo bellamente ensamblado en el que la horizontalidad de la fachada principal queda rota por la verticalidad de la iglesia. Las obras se desarrollaron entre 1716 y 1760, bajo el patrocinio de fray Pedro de Anguita, fray Pedro González y fray Lorenzo García Ramírez. Se desconocen los maestros que las llevaron a cabo, aunque no se descarta la colaboración de los hermanos Francisco y Juan Aguilar del Río Arriaza, Tomás Jerónimo de Pedrajas y Alonso Gómez de Sandoval. La iglesia La iglesia se realiza entre 1716 y 1745. Está situada en el centro del conjunto y sirve de eje divisorio entre los dos claustros que articulan el edificio, cuyo nexo de unión lo constituye la galería que circunda la cabecera del templo. Al exterior muestra una fachada estructurada en tres calles por medio de pilastras que separan la parte central de las laterales, rematadas éstas por sendas espadañas. La calle central coincide con el desarrollo de la nave principal del templo; está formada por tres cuerpos sobre los que descansa un frontón triangular coronado por la figura de San Rafael. En el centro sobresale la portada de la iglesia, en piedra blanca, con gran movimiento en las cornisas y soportes, destacando en el segundo cuerpo una hornacina con la imagen pétrea de Nuestra Señora de la Merced. La iglesia es planta de cruz latina inscrita en un rectángulo. Tiene cabecera plana -flanqueada por sacristías-, tras naves y crucero. Por encima de los arcos formeros, a lo largo de los brazos de la cruz, se abren tribunas. La nave central se cubre con bóveda de cañón con lunetos y los brazos del crucero lo hacen con cuartos de esfera divididos en tres gajos. Los elementos tectónicos se decoran con medallones policromados, donde aparecen bustos en medio relieve de los santos y beatos de la orden mercedaria enmarcados por ricas yeserías. Tiene un amplísimo coro alto cuyo antepecho se incurva para incorporar las tribunas de los órganos, desdichadamente perdidos. El testero del coro lucía una pintura mural de medio punto, que representaba la Aparición de San Rafael al beato Simón de Sousa realizada por José Ignacio de Cobo y Guzmán. Alrededor de 1770 se encargó a Alonso Gómez de Sandoval el retablo mayor, desgraciadamente desaparecido en el violento incendio de 1978. De los mismos años se conservan los altares laterales de Santa María del Socorro y Santa Mariana, obras hechas en estuco e igualmente relacionadas con Gómez de Sandoval, aunque están muy restauradas. El claustro y la escalera

Escalera del claustro principal
Una vez concluida la iglesia debió realizarse el claustro principal, terminado hacia 1752. Es de planta cuadrangular y está formado por dos pisos; el bajo es porticado y presenta arcos de medio punto sobre pares de columnas toscanas. El segundo piso es cerrado y tiene pilastras, ornamentadas con placados, y balcones en los espacios intermedios. En el centro luce una gran fuente de mármol negro. Todo el conjunto va profusamente decorado, destacando la cornisa con pinjantes y la pintura que recubre los elementos ornamentales, que refuerza su estética barroca. Por entonces se construyó también la escalera que arranca de la crujía meridional del patio y pone en comunicación las dos plantas del edificio. Es de tipo imperial con caja cuadrangular. Muestra un primer tiro sencillo y centrado, que se divide en dos laterales paralelos a partir de un descanso, completando así la cuadratura de la planta. Está realizada con mármoles de diversos colores, embutidos y taraceados, consiguiéndose una obra de gran prestancia, relacionada por su estética con Gómez de Sandoval. Se cubre con una cúpula semiesférica decorada con relieves policromados que representan escenas de la vida de San Pedro Nolasco. Conservación del edificio

Vista de conjunto
El exterior del edificio conventual ha sufrido diversas alteraciones a lo largo del tiempo, siendo la fachada oriental la que mejor ha conservado su forma original. El lado septentrional, aun cuando muestra las mismas características formales que el frente principal, manifiesta la incorporación de elementos nuevos, como la portada de piedra que procede de la portería de San Pedro de Alcántara, obra del siglo XVI, emplazada allí en la década de 1960 por expreso deseo del arquitecto de la corporación Rafael de la Hoz. La fachada sur se creó por entonces y se decora con un gran reloj de sol, obra de este mismo arquitecto.

Additional Hints (Decrypt)

Pnpué zntaégvpb. Nqwhagb sbgb fcbyvre. Sryvm trbpnpuvat.

Decryption Key

A|B|C|D|E|F|G|H|I|J|K|L|M
-------------------------
N|O|P|Q|R|S|T|U|V|W|X|Y|Z

(letter above equals below, and vice versa)