Esta historia habla del día en que por suerte o por destino descubrimos el secreto de Las Pléyades.
Hace un tiempo atrás empezamos a investigar un poco acerca de las poblaciones tartesicas que vivieron en estas tierras.
Tras leer muchos artículos históricos y arqueológicos descubrimos que la zona de Camas, y mas concretamente el Cerro de Santa Brigida, Cerro Blanco y los aledaños sirvieron a estas civilizaciones tartesicas como centros de culto y adoración a Las Pléyades.
Despues de este descubrimiento no nos pudimos resistir a contar esta historia, y que mejor manera que poniendo un cache, al cual lo llamamos: TARTESSOS, Pirámides Tumulares.
Una vez encontrada la localización adecuada para este cache decidimos seguir recorriendo la zona para intentar aprender un poco mas de esta civilización.
Poco a poco, paseando, se nos hizo de noche y aprovechamos para descansar unos instantes mientras veiamos las estrellas. La poca contaminación luminica nos permitió ver el grupo de estrellas llamado Pléyades.
Imaginando que debió ocurrir hace muchos muchos años en estos rituales y casi hipnotizados por el silencio y la belleza de las vistas una sensacion extraña empezó a invadirnos,algo nos obligaba a levantarnos y movernos, era como si Las Pléyades nos quisieran llevar a algún sitio.
Empezamos a andar y a andar hasta que de repente esa sensación se desvaneció, entonces mire al suelo y vi algo que se iluminaba con las luz de las estrellas.
No nos lo podíamos creer, habíamos descubierto el secreto de Las Pléyades, del cual, la reina Refulgente era su protectora.
No sabemos como llego hasta aquí, tal vez fue enterrado y oculto rápidamente para que el secreto no fuera profanado, quien sabe, pero nosotros al descubrirlo volvimos a dar vida al pasado.
Por eso marcamos este tesoro para que solo aquellos que crean en la magia puedan encontrarlo para que entre todos mantengamos viva la llama.