Skip to content

LAS CUATRO CALLES Y LA TRINIDAD EN SEGOVIA Traditional Cache

Hidden : 9/24/2014
Difficulty:
1.5 out of 5
Terrain:
1.5 out of 5

Size: Size:   micro (micro)

Join now to view geocache location details. It's free!

Watch

How Geocaching Works

Please note Use of geocaching.com services is subject to the terms and conditions in our disclaimer.

Geocache Description:


La iglesia de La Trinidad se alza en la parte norte del recinto amurallado de Segovia. En esta zona, conocida como el Barrio de los Caballeros, se encuentran numerosas casas nobiliarias, palacios y fortalezas construidas entre los siglos XII y XVI.
Sin embargo, el barrio de las Cuatro Calles entre La Trinidad y próxima Plaza Mayor era hasta hace poco más de un siglo un nudo de callejas bullicioso y popular.
Para conocer el contraste entre ambos proponemos, partiendo de la Plaza Mayor, un corto recorrido por este barrio y una visita a la iglesia de la Trinidad.


LAS CUATRO CALLES


Comenzaremos al oeste de la Plaza Mayor, en la calle del Cronista Lecea.
En el lugar actual de esta calle y en el ocupado por el teatro Juan Bravo (antes Mesón Grande) que vemos a nuestra izquierda, se cruzaban a principios de siglo XX las calles de Herrería, Nevería, Cabritería y Malcocinado, conocidas como las Cuatro Calles. Todas ellas eran muy angostas: posadas, mesones, tabernas, panaderías y carnicerías formaban una zona picaresca y comercial, en la que eran personajes habituales mendigos y tipos populares.



Carnicerías y mesones dieron el nombre a la calle Cabritería. En los figones de Malcocinado era muy apreciado un guiso con ese nombre, similar al actual cocido, pero que incluía además ingredientes como callos, morcilla de cabra, oreja de cerdo y diversos productos de casquería. Tan popular era este plato, que se prohibió su venta en la mañana de los días de fiesta hasta que no acabase la misa parroquial, porque los fieles dejaban de acudir a misa para comer malcocinado. La Nevería y la Herrería también eran nombradas así por algunos de sus establecimientos.

En las fondas de las Cuatro Calles se alojaban los arrieros y comerciantes que acudían al cercano mercado de los jueves. La plaza de la Rubia tomó su nombre de una planta usada para teñir paños (Rubia tinctoria L.) que se vendía en ella. Todavía existen en sus alrededores callejones y pasadizos. Merece una visita el corralillo del Patín: encontrarlo puede ser un reto aun conociendo sus coordenadas.



Siguiendo desde la plaza de la Rubia la estrecha travesía del mismo nombre llegamos a una pequeña plaza. A nuestra izquierda parte una calle que nos conduce a la iglesia de la Trinidad.


IGLESIA DE LA TRINIDAD


Se han hallado restos de una primitiva (fines siglo XI) iglesia románica en su parte sur, que comunicaba con la iglesia actual, probablemente construida en el siglo XII.

Consta de una sola nave, con el atrio habitual en el románico segoviano orientado al sur. Su ábside es difícil de observar debido a la proximidad de otras edificaciones. El atrio presenta dos entradas y una amplia portada central que conduce a un lateral de la iglesia. Sus capiteles están decorados con motivos vegetales.



La portada principal, al oeste, esta compuesta por cinco arcos, coronados por capiteles con aves y felinos. En su parte superior vemos un lábaro formado por las letras griegas X y P, del que existe mención en tiempos próximos a su construcción.

Si nuestra visita coincide con el horario de apertura de iglesia, podremos admirar su abside, oculto hasta no hace mucho por un retablo barroco. Esta formado por una doble arquería, en las que los cuatro arcos centrales se prolongan con otros laterales, que nos recuerda la de la iglesia de San Millán. En el centro hay un retablo de cerámica, que procede del taller de los Zuloaga, y en el lado norte se encuentra la capilla de la familia Del Campo, protectora de esta iglesia, cuya casa nobiliaria podemos ver frente al atrio de la iglesia.

TORREON DE HERCULES

Un amplio edificio, ocupado por el convento de las MM Dominicas, se alza frente a la portada de la iglesia.
Su pared sur, con elevados muros y sin ventanas, nos da una impresión de antigüedad, tanto así que durante mucho tiempo se creyó en su origen romano. En su interior, en una zona de visita prohibida por la clausura, existe una estatua o relieve. Una cabeza de jabalí parece salir de la pared: sobre ella hay una pequeña figura de pie, que se pensó podría representar a Hércules.
De ahí viene el nombre de Torreón de Hércules con el que se conoce a la torre que se alza en el centro del edificio, y que junto con su supuesta antigüedad dio lugar a las leyendas que atribuyen a Hércules la fundación de Segovia y la construcción del Acueducto. Conviene separarnos del muro para contemplar mejor esta torre de cuatro cuerpos y cerca de 30 metros de altura.



La información más fiable sobre su origen nos llega del siglo XIII, e indica que se trata de una fortaleza palacio de la familia de los Alimán, por lo que se llamó Palacio de Alimán o del Alemán. A comienzos del siglo XVI pasó a ser propiedad de las monjas dominicas. Su interior con detalles y pinturas mudéjares, así como el juego del alquerque grabado en sus sillares, confirman su origen medieval.

Desde aquí podemos seguir hacia el oeste hasta la próxima Plaza Mayor, pasando muy cerca de donde se encuentra el cache, o rodear este edificio, y bajar por la Calle Capuchinos Alta en dirección norte hasta la

IGLESIA DE SAN QUIRCE

La iglesia que vemos al frente fue cerrada al culto en el siglo XIX, y pudo correr la misma suerte que otras pequeñas iglesias segovianas hoy desaparecidas. Pero la Universidad Popular Segoviana la compró y restauró en 1927, y es ahora sede de la Real Academia de Historia y Arte de San Quirce. Es de pequeño tamaño, con una sola nave y dos bellos ábsides.
La puerta situada en la torre presenta una inscripción difícil de leer, que se ha pensado puede indicar “León hizo aquí un santuario. Oremos”. De ser así, León sería el nombre de uno de los arquitectos de estos templos, casi siempre anónimos.

Algo mas abajo salimos a la calle de San Quirce, abierta al tráfico. Frente a nosotros hay un notable edificio, con dos grandes escudos, quizá los mejores de toda Segovia, en su puerta principal. Son los escudos de los Contreras y los Amezqueta, fundadores de este convento de frailes Capuchinos que luego pasó a ser de monjas Oblatas, hoy reconvertido en restaurante y próximamente en hotel.

Retrocediendo por la calle Capuchinos Alta y siguiendo luego la Cabritería llegaremos hasta el lugar del cache, muy cerca de la Plaza Mayor.

Additional Hints (Decrypt)

Zntaégvpb.

Decryption Key

A|B|C|D|E|F|G|H|I|J|K|L|M
-------------------------
N|O|P|Q|R|S|T|U|V|W|X|Y|Z

(letter above equals below, and vice versa)