El Ángel de Valdepeñas
Inaugurado el 19 de noviembre de 1964 en el Cerro de las Aguzaderas, a 2 kms. al norte de Valdepeñas (Ciudad Real), y visible desde la actual Autovía A4, encontramos el denominado como “Ángel de la Victoria y la Paz”, un monumento dedicado a los “mártires de nuestra cruzada”, obra del escultor extremeño Juan de Ávalos, autor, entre otros, del grupo escultórico de “El Valle de los Caídos”. La obra consistía en la figura de un ángel de 15 m. de altura con una espada en forma de cruz de 10 m. realizada en chapa de cobre repujada recubriendo una armadura interior de hierro, y dos hitos de 25 m. de alto que representan una puerta de la paz. En su base la Diputación de Ciudad Real colocó la siguiente inscripción: «La provincia de C. Real al Caudillo, como homenaje de gratitud en recuerdo de sus mártires 1936-1964».
Debido a la ideología de la descomunal escultura, en el año 1976 la organización terrorista GRAPO quiso volar este símbolo franquista con un artefacto explosivo, sin embargo, el Ángel soportó la explosión, aunque quedó muy deteriorado, perdiendo toda la figura de piedra (a excepción de manos y empuñadura de la espada), y quedando en pie toda la estructura metálica de su interior.
Muchos años después, la escultura sigue en pie en el mismo estado anteriormente comentado, aunque el paso del tiempo y el abandono han ido haciendo mella en la misma y poco a poco ha ido perdiendo algunas de las partes metálicas que habían quedado intactas.
Información obtenida de: http://www.noudiari.es/2013/07/viajes-a-ninguna-parte-el-angel-de-la-muerte-de-valdepenas/
Cómo llegar
Como decía, el estado actual que presenta es de abandono, existiendo un camino parcialmente asfaltado en bastante mal estado a través del cual se puede llegar hasta el mismo Ángel rodeando el cerro (edit: a principios de 2017 el camino de subida ha sido asfaltado, encontrándose ahora en perfecto estado para poder subir en coche), pudiéndose acceder al mismo desde la A4 (dirección Madrid), tomando la salida 197, o desde el mismo pueblo, buscando un carreterín cuyo comienzo se encuentra en una zona de urbanización de chalets muy poco construida, en las traseras del hipermercado “Alcampo”, que es el actual ferial de Valdepeñas. Para llegar al comienzo del carreterín hay que circular por las Avenidas de la urbanización (estas sí están construidas y señalizadas) sin perder de vista la referencia del Ángel, hasta llegar a una zona en la que hay construida una casa aislada “en medio de la nada”. Al otro lado de la avenida que discurre junto a la casa comienza el carreterín. A través de cualquiera de las dos posibilidades termina llegándose a una rotonda en la que habrá que tomar la salida “camino” para acceder al camino de grava. A pesar del mal estado del camino, se puede acceder en coche sin problema circulando con cuidado y aparcar junto al Ángel (asfaltado desde 2017 estando actualmente en perfecto estado para acceder en vehículo o caminando).
El caché
Se trata de un contenedor pequeño tipo “tupper” que originariamente contiene los siguientes objetos para intercambiar:
- Mini excavadora de juguete.
- Pegatinas de princesas Disney.
- Peonza.
- Lápiz, sacapuntas y cuaderno de registro (para dejar en el caché).
Independientemente de la ideología con la cual fuera construida la escultura y del estado de abandono de la misma (entorno incluido), el lugar desprende un halo especial que bien merece una visita. Se trata de un lugar tranquilo, silencioso y normalmente solitario, desde el que se puede observar una magnífica vista de Valdepeñas y de toda su periferia. Así mismo, el Ángel sigue impresionando por lo curioso de su actual estado y de la historia que entraña detrás, además de por su espectacular tamaño, y para los menos escépticos, incluso se cuentan algunas historias de sucesos “difíciles de explicar de forma racional” acaecidos en las inmediaciones, pero eso ya queda a la credibilidad de cada uno.
¡Buena búsqueda!