Llubí, de "Castro Lupino", castillo del lobo. Suena fiero, pero los llubiners son tranquilos, y acogedores. De aquí es el "tres caires", las olivas Perelló, las mejores alcaparras del mundo (aunque vengan de otros lugares más baratas) y el corazón de Mallorca (repito).
La plaza de arriba es la de la iglesia, la de abajo la de la carretera, ahora más tranquila tras hacerse la circunvalación y los padres pueden estar mas sosegados con sus niños en los columpios.
Llubí pueblo bien merecía un caché.