El monumento emblemático y joya arquitectónica de Muniesa, la torre mudejar del siglo XVI, se yergue altiva a los pies de la Iglesia de Ntra. Sra. De la Asunción, y con sus 55 metros de altura define el perfil de nuestro pueblo, en la amplia llanura que lo rodea.
Junto con la Iglesia, fue declarada monumento nacional en el año 1.931, y recientemente el 14 de Diciembre de 2.001, dentro del Mudejar de Aragón, ha sido designada Patrimonio de la Humanidad, por la UNESCO.
Formó parte de una iglesia anterior también mudejar, previsiblemente del siglo XIV, a tenor de los restos de un muro que todavía se pueden ver en su base, con una decoración de rombos y franjas de ladrillo dispuesto en ángulo y a tizón.
De forma octogonal, de tres metros en cada lado de su base, con los ángulos subrayados por pilares, y sobre el basamento de cantería, se levantan los cinco cuerpos de ladrillo, separados por cornisas de piedras y bandas de azulejos de cerámica en blanco y verde dispuesta en frisos.
El primer cuerpo tiene adornos de esquinillas y rombos, con un grosor en sus paredes de 1,60 mts.; el segundo presenta rombos y arquerías quebradas, y un grosor de muros de 1,50 mts.; el tercero muestra óculos, rombos y vanos de medio punto, una anchura en sus paredes de 1,10 mts., en este cuerpo se encuentra situado el campanario, el cuarto presenta la misma decoración, y hasta el final de la torre una anchura en sus muros de 70 ctms.; y finalmente el quinto, además de los óculos, tiene dientes de sierra y un chapitel añadido presumiblemente en el siglo XVIII .
Su estructura interna, conserva un machón central hueco hasta la altura de los vanos del segundo piso, y entre éste y la parede exterior de la torre se dispone la escalera, de 125 escalones hasta el campanario, siguiendo el acceso hacia arriba por estructura metálica móvil.