Conocido también con el nombre de Tapiz de Piedra, este mural de 700 m. cuadrados, realizado con materiales de deshecho usados en construcción, fue creado en los años 1989-1990. Se extiende sobre una de las paredes del monte de Santa Margarita.
La obra sufrió, a lo largo de su existencia, el maltrato por parte del ayuntamiento, que dejó crecer la vegetación hasta casi inundar el mural y que permitió, con un total desprecio a la obra artística, la construcción de una pasarela peatonal sobre la avenida adyacente que destruyó parcialmente la obra.
En 2015 se llevó a cabo una necesaria limpieza y rehabilitación que lo ha dejado en su estado actual.
El caché es de tamaño nano. Muy pequeñito.