Situadas entre Nueva Montaña y Camargo, justo al lado del Centro Comercial Bahía al Valle Real, con las vías férreas y autovía, con las aguas saladas del Cantábrico y las de la Ría de Raos y el Canal de Alday, este espacio natural supone un pulmón para los animales y para los paseantes que pueden adentrarse por las sendas en contacto con la naturaleza.
En otro tiempo, se mezclaban allí de forma natural las aguas de la Rías de Raos y el Canal de Alday con las del Mar Cantábrico, ahora regulado por exclusas.
La Marisma de Alday es el vestigio de lo que un día fue una gran marisma. En la actualidad se encuentra en un área muy antropizada, rodeada por infraestructuras como autovías, líneas de FEVE y RENFE y el centro comercial Valle Real de Maliaño, en cuyo aparcamiento se encuentra la Casa de la Naturaleza de la Fundación Naturaleza y Hombre. La vía de FEVE cruza la marisma partiéndola en dos: la Zona Salada y la Zona Dulce.
A pesar de la humanización de la zona, la Marisma de Alday tiene un gran interés ornitológico y ambiental, siendo el hábitat de numerosas aves acuáticas y lugar de estancia temporal y refugio de otras muchas durante las migraciones que se producen cada año.