Este puente de origen medieval formaba parte de una vía de comunicación denominada Camiño Miñoto Ribeiro que unía la zona de O Ribeiro, desde Ribadavia, hasta las importantes ciudades de Pontevedra, Santiago o Padrón. Su tránsito principal eran para los arrieros que comerciaban con vino procedente de esta zona hacia las ciudades burguesas y hacia los puertos, en donde el preciado vino de O Ribeiro incluso se importaba a Inglaterra.
A Ponte do Santo Sepulcro es un puente de dos arcos con origen medieval pero con trazas de haber sido reformado en el siglo XVIII. Sobre la clave de la arcada más grande y aguas arriba tiene grabada la Cruz do Santo Sepulcro y aguas abajo la figura de un santo que algunos interpretan como Santiago.
Junto al puente y sobre el mismo río Arenteiro existe un molino de tres ruedas que perteneció a la orden Encomienda de San Juan de Pazos de Arenteiro.
Para llegar hasta el puente, lo mejor es recorrer a pie la magnífica senda creada a orillas del río Arenteiro y que nos llevará hasta el llamado Pozo dos Fumes. A tan solo 500 metros de la hermosa villa histórica de Pazos de Arenteiro encontraremos el puente del Santo Sepulcro.