Este barrio tiene una historia muy interesante y particular. Está ubicado en la zona sur de la ciudad, cerca del río Miño y de otros puntos importantes de la ciudad.
El barrio de A Cuña ha estado tradicionalmente asociado a un entorno de viviendas populares y de clase trabajadora. A lo largo de su historia, ha experimentado un desarrollo constante, aunque de forma algo más modesta en comparación con otras áreas de la ciudad.
El nombre del barrio, "A Cuña", hace referencia a la forma geográfica de la zona, que se encuentra en una especie de estrechamiento de tierra, entre otras áreas de la ciudad. Esta ubicación ha influido en su crecimiento y estructura urbanística. A lo largo del tiempo, el barrio ha sido un lugar de residencia para muchas familias que, en su mayoría, se dedicaban a trabajos de la industria, la construcción y otros oficios manuales.
En los últimos años, A Cuña ha experimentado algunos cambios urbanísticos y mejoras en infraestructuras, pero sigue conservando un carácter popular, con calles estrechas y edificios que reflejan esa historia más humilde y obrera.
Este barrio también es conocido por su cercanía al centro de Ourense, lo que le da una gran accesibilidad, y por su fuerte identidad vecinal. A lo largo de los años, A Cuña ha mantenido un fuerte sentimiento de comunidad, donde los vecinos se conocen y se ayudan entre sí, lo que hace que, a pesar de los cambios que ha sufrido, siga siendo un lugar con mucha vida y personalidad dentro de la ciudad.
En resumen, A Cuña es un barrio que, aunque modesto en sus orígenes, ha jugado un papel importante en la historia de Ourense, y hoy en día sigue siendo una parte esencial de la ciudad, con su carácter tradicional y su ambiente cercano.