Caché escondido en las proximidades de la esgoladora, popular tobogán natural situado en la base del monte calvario de Bocairent.
El caché es un contenedor de plástico tipo tupper, protegido por una bolsa.
Su contenido inicial es: perla, concha, llavero, plato, pelota de golf, instrucciones para mugles y logbook, lápiz y sacapuntas. Oculto y disimulado en un hueco bajo una roca, arriba de la esgoladora.
¡¡NO PUBLICAR SPOILERS!! Así resultará más entretenido.
Un atractivo más para acercarte a este pueblo de interior donde visitar su cava de Sant Blai, sus museos, el monasterio rupestre, recientemente abierto al público, y les covetes dels moros, la plaza de toros más antigua de la comunidad (1843) y monumento nacional, excavada en la roca.
Puedes aprovechar para comer en las inmediaciones, hacer otros cachés muy cercanos (ver al final), seguir las diferentes rutas que pasan por aquí (ver al final) , subir al Santo Cristo, comer en la Fuente de Mariola (N 38° 44.780 W 000° 32.427) o en el nacimiento del río Vinalopó (N 38° 43.200 W 000° 37.567) o decidir perderte por su barrio medieval (barrio viejo para los locales) con sus calles retorcidas y empinadas protegidas por sus siete ermitas.
La esgoladora y el puente del Sto. Cristo
La esgoladora está situada al norte del casco urbano y al pie de la colina del Santo Cristo y es una gran piedra plana e inclinada que ha servido de patio de juegos a todos los bocairentinos, niños y no tan niños, desde siempre.
El puente se sitúa sobre la cima de la ‘sierra de Agullent’, dispuesto estratégicamente para unir las dos vertientes del ‘Barranco del Infierno’ y así facilitar el acceso al santuario del Santísimo Cristo del Monte Calvario, del cual adquiere el nombre.
El historiador Cavanilles en su obra “Observaciones sobre la Historia Natural, Geografía, Agricultura, población y frutos del Reyno de Valencia”, escribe:
”Las peñas del monte del Santísimo Cristo son calizas, blancas, de grano fino y de mediana dureza. De ellas se hizo el puente para entrar a Bocayrente por la parte septentrional…”
Se construyó entre los años 1780 y 1788, época en la que ejercía el cargo de Superintendente de Caminos el Conde de Floridablanca, época en la que se realizaron numerosas obras de carácter público como carreteras, puentes, etc.
El puente presenta un arco ojival o gótico de grandes dimensiones, formado a su vez por dos arcos cortados en la parte superior y donde se apoyan las pilastras. Los arcos y pilastras se construyen con piedra de sillería y el resto está formado por paramentos a ambos lados del mismo, llegando hasta la roca en los márgenes del río.
La calzada del puente es de unos 2 m. de ancho, cerrada por dos paredones de 1’5m de altura y reforzados por dos contrafuertes a cada uno de los lados del ojo del puente. En total, contamos hasta ocho contrafuertes, teniendo una anchura mayor los cuatro exteriores y una menor los cuatro restantes e interiores.
COMO LLEGAR
De la Plaza del Ayuntamiento sale el Carreró del Santo Cristo.
Debes bajarlo totalmente y coger un camino de piedra a la derecha en las coordenadas N38° 46.079 W0° 36.700 (el camino que sale a unos 25 m de la plaza a la derecha te lleva a les Covetes dels Moros).
Cruza el puente del Santo Cristo y al otro lado encontrarás la esgoladora (N 38° 46.179 / W 000° 36.617).
Si sigues el camino y los casalicios del Vía Crucis y la Virgen de la Soledad, llegarás a la cima. A lo largo de la subida podrás disfrutar de una magnífica vista del pueblo y de les Covetes dels Moros y llegarás a la Ermita del Santo Cristo, perfectamente visible desde la carretera, al monumento a los caídos en la batalla de Camorra y a la cueva de sor Piedad de la Cruz, cada uno de ellos con su respectivo caché.
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¡¡Disfruta de tu estancia!!
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