Con la ubicación de este cache quiero reflejar la línea
divisoria entre la ciudad y el campo. En realidad, es una metáfora
del olvido al que se ha sometido a éste último desde hace años,
sobre todo en las zonas con escasa o nula actividad industrial.
Sobre todo se notó en los pueblos de la sierra y del Señorío de
Molina, aunque también muchas zonas de la Alcarria. Los datos son
claros: durante los años sesenta y setenta, mientras en el valle
del Henares las industrias empezaban a brotar como hongos, los
pueblos quedaron semiabandonados.
Respecto al cache, para sacar las coordenadas finales, hay que
hacer dos observaciones en el entorno.
Para sacar la primera, es necesario recorrer el camino que sale
cruzando el puente subterráneo a la derecha (para los que sois de
Guadalajara, hacia donde se encontraba el desguace). Sumando el
número de caminos que hay en cada cruce que nos encontremos,
hallaremos “A”.
Pista: en las coordenadas iniciales (tras cruzar el puente) nos
encontramos con el primer cruce que tiene tres posibles direcciones
(una de regreso al puente, otra hacia la carretera de Iriépal y
otra hacia el resto de los cruces). Hay que ir siempre en paralelo
a la carretera N-II, y cuidado, porque a veces, pasan coches por
los caminos.
A = 3 + … (el camino finaliza en asfalto, después de ir
un poco al galope y sentirse en la cima). Los accesos a fincas
particulares no cuentan como cruce.
Para obtener “B” hay que contar el número de pilares
que tiene el puente desde donde se ha hecho una de las fotos con
nieve.
Pista: en las otras fotos hay referencias visuales, para poder
identificar el puente, y ojo con el tráfico.
Coordenadas finales: N “40º” ((A*2)+4) . ((B*B)+3)
“0” W “003º” “0” (A-9) .
(((A+B)*2)+3) “9”
< Coordenadas finales: N40 38.421 W3 08.493 (directas)