Ermita del Calvario(Fuente Tójar)

Se encuentra a unos veinte metros de
distancia de la última casa de la calle del Calvario. Su
construcción se debe a la promesa que un militar hizo un día de
peligro en el frente de la Guerra Civil de 1936-39. Terminada la
contienda y fiel a su promesa, el militar realizó los trámites
necesarios ante el cura de Fuente Tójar. Unos meses después de esta
orden comenzaron las obras de la nueva ermita. El militar
mencionado nacido en Fuente Tójar, así como sus progenitores,
recaudó fondos entre los vecinos, nombrando a Antonio Ortega
González, tesorero de dichos bienes.

(calle del Calvario)
Aparte de la necesidad de algún
albañil, casi toda la mano de obra fue realizada por soldados del
Cuerpo de Infantería de Córdoba. Las obras duraron algunos meses,
el edificio consta de dos habitaciones (sacristía y templo) y un
campanario. El capitán creyó cumplida su promesa y ya nadie secundó
la segunda parte, o sea, proveer de imágenes y campana a la
ermita.
Muchos años después, las puertas de
la ermita se fueron deteriorando hasta que desaparecieron. El
tejado se fue hundiendo. Las paredes mudas y solitarias permanecían
aun, formando un estado de ruina. Durante algunos años sirvió su
habitación principal para montar en ella una garita de venta de
bebidas, con ocasión de la Feria de Ganado que se hacía en aquel
lugar.
"HISTORIA DE LA VILLA DE FUENTE TÓJAR."-Manuel Ruiz
Gonzalez (el de Fausto). Editado por el Ayuntamiento de Fuente
Tójar
Hoy en día la ermita se encuentra
restaurada y forma parte del patrimonio del pueblo.
El caché se encuentra a unos 150
m siguiendo un sendero que comienza detrás de la
ermita.