|
La rica historia de Alcaraz se percibe en sus
calles estrechas, en su Plaza Mayor, en sus ennoblecidas fachadas,
en sus iglesias, etc... a cada paso, elegantes enclaves donde los
alcaraceños disfrutan de la tranquilidad, sólo rota por la visita
de los turistas. Y las fiestas y la gastronomía, un compendio de
elementos culturales que identifican los rasgos de una
comunidad.
EL
CACHÉ
El
caché se encuentra en la zona más alta de Alcaraz y aunque
podéis llegar hasta casi el mismo caché en coche, os recomiendo que
subáis disfrutando de un bonito paseo por las calles de Alcaraz. El
caché es tamaño micro, con libro de registro y lápiz. Por favor sed
cuidadosos en su búsqueda ya que en días festivos la zona puede
estar muy transitada. Espero que disfrutéis de este precioso pueblo
y de sus gentes. Mucha suerte y ojalá que os guste este encantador
pueblo.
HISTORIA Y
MONUMENTOS
El paso de la historia
ha dejado edificios testimonio de los siglos, las artes y las
épocas que denotan la importancia que tuvo en el pasado.
Particularmente dentro de la ciudad de Alcaraz destaca el conjunto
monumental formado alrededor de la Plaza Mayor, construida
en el s. XVI y de carácter solemne, está unida a la plazoleta de la
bella iglesia de la Trinidad. El amplio espacio que queda
abierto se destinaba al mercado, ya que las actividades comerciales
tuvieron gran importancia en el crecimiento de la
ciudad.
Con esta finalidad se
construyó en la misma época la lonja del Ayuntamiento o del
Ahorí, que se encuentran al norte de la plaza y que hacía las
veces de aduana. La Puerta del Ahorí o Aduana, obra del genial
arquitecto Andrés de Vandelvira, es una construcción
plateresca con balaustrada, cuya entrada está enmarcada con un arco
de medio punto y columnas. El edificio está decorado con los
escudos de la ciudad y los bustos de Elena y Paris. Otra lonja es
la de La Regatería, al oeste; con las características sobrias de la
época.
La Lonja del
Corregidor se situaba en la parte sur y estaba adosada al
convento de Santo Domingo (ahora desaparecido). Esta última es de
la que más datos se tienen. Se sabe que fue construida en 1518 por
Juan de Chiberría, aunque las trazas del diseño las realizó el
famoso arquitecto del renacimiento Andrés de Vandelvira, y
reconstruida en 1718. En la reconstrucción se incorporaron a los
primitivos antepechos calados y a la galería superior, una arquería
inferior siguiendo los modelos estéticos predominantes en la
plaza.
La única parroquia
alcaraceña es la iglesia de la Santísima Trinidad; alzada en
el s. XV y con añadidos posteriores. A finales de este siglo quedó
terminada la parte gótica; muestra de ello son las armas que pueden
verse en la bóveda central, con las armas de los Reyes Católicos
pero con la salvedad de que no figura la granada, que simboliza la
victoria del último territorio musulmán, lo que hace pensar que el
escudo estaba allí antes de 1492. Al gótico pertenece también la
portada del templo y una magnífica colección de estatuaria del s.
XV. La fisonomía del interior de la iglesia también muestra algunos
detalles típicamente renacentistas. Está formada por tres naves
divididas en cuatro tramos por pilares, pero sin crucero. El estilo
renacentista se puede apreciar en las tres capillas renacentistas
construidas a lo largo del siglo XVI en cuyo estructura se puede
apreciar el estilo vandelviriano, una es la capilla de los
Ballesteros, otra la de Pedro de Aragón, esta con tres bóvedas de
vaidas y por último la capilla del Bautismo con un a pila esculpida
del siglo XVI. 
Al sureste de la plaza,
sorprenden las torres de El Tardón y La Trinidad, símbolo de
la ciudad de Alcaraz y elemento decorativo de extraordinaria
calidad, puesto que tienen características prismáticas irregulares
y forman una curiosa pareja. La primera se construyó a partir de
mediados del s. XVI por Bartolomé Flores, y trazada por Andrés de
Vandelvira, aunque la inscripción de la campana reza 1444. El
nombre, Tardón, se debe a que, según se cuenta, tocaba de tarde en
tarde para avisar de acontecimientos varios. De la antigua
parroquia de San Miguel Arcángel sólo queda la capilla del
Rosario de estilo gótico isabelino, única en toda la provincia de
Albacete, por su escultura marginal, destacando la pila del
bautismo donde fue bautizado el arquitecto oriundo de la ciudad y
el retablo neoclásico de Roque López.
El Monasterio de
María Magdalena, actualmente habitado por las monjas
franciscanas, data de los siglos XVI y XVII. Al interior, un bello
y cálido claustro de forma rectangular con tres cuerpos, abre el
espacio monacal. Dentro del Monasterio se conserva una numerosa
colección de imágenes de incalculable valor.
Pasear por el casco
urbano es realizar una minuciosa tarea de observación porque las
casas señoriales pueden verse por doquier; incluso la
restauración de antiguas casas ha sacado a la luz antiguas
portadas, dinteles, grabados, relieves… que formaban parte
de las casas que se encuentran en Alcaraz. La Casa de los Galianos,
por ejemplo, tiene en su fachada las figuras de dos guerreros; esta
casa puede verse en la Calle Mayor como ejemplo de casa señorial de
la época.
El Santuario de
Nuestra Señora de Cortes es tal vez el edificio más emblemático
de toda la comarca. Se alza sobre una colina a unos seis kilómetros
de la ciudad y congrega miles de fieles al año que se acercan hasta
el Santuario para rendir culto a la idolatrada Virgen de Cortes. El
santuario, como hoy se conoce, se construyó a principios del
s.XVIII, pero ya existe constancia de los orígenes en el año 1222,
casi diez años después de la conquista cristiana que llevó a cabo
Alfonso VIII. La imagen de la virgen es de la época tardo-románica
y forma parte del conjunto de excelente imágenes religiosas del
Santuario de Cortes.
FIESTAS POPULARES
Que duda cabe que
Alcaraz goza de recursos turísticos de interés, y entre ellos
también están las fiestas y las tradiciones. Es aconsejable hacer
coincidir la visita entre el 4 y el 9 de septiembre, días en los
que se celebran las fiestas mayores en honor a Nuestra Señora de
Cortes. Las callejuelas, engalanadas, reflejan el bullicio de los
alcaraceños. Adquieren especial importancia en estas jornadas los
encierros de reses bravas por el casco urbano y las vespertinas
corridas de toros. En la noche, las verbenas adquieren
protagonismo. Pero si hay un día que los lugareños festejan con
fervor religioso, y que a la postre es el más importante, es la
romería del 8 de septiembre. Unos días antes, concretamente el 26
de agosto, la patrona es traída desde el santuario de Cortes, donde
permanece todo el año, hasta la iglesia de la Trinidad. Cuando
llega el gran día, los romeros transportan la imagen de la Virgen
de nuevo hasta el santuario. Durante el trayecto se observan
panorámicas excelentes de la Sierra de Alcaraz. Es frecuente
encontrar a penitentes que realizan ofrendas florales y donativos a
la virgen. La importancia de la romería ha sobrepasado los límites
de Alcaraz a otros municipios, e incluso a otras
provincias.
 El 1
de febrero también es un día especial, San Ignacio, patrón de los
alcaraceños. Al día siguiente, las gentes de Alcaraz conmemoran la
Candelaria una procesión y el posterior reparto de las
tradicionales rocas. Ya en meses primaverales, en la efeméride de
San Marcos (25 de Abril), los lugareños acuden a la Fuente de
Arjona para degustar la tradicional
"mona".
Continuando por el
calendario festivo de este municipio serrano, el primer fin de
semana de mayo, aprovechando el día 1 de mayo para cantar los Mayos
a Nª Sª de Cortes, se celebra el mercado medieval. Numerosos
puestos de artesanía, talleres demostrativos, venta de productos
típicos, etc... hacen que, junto a eventos culturales, juegos
cortos, entremeses, teatros y exposiciones alfombras, Alcaraz
recupere su esencia medieval.
Indagando en el pasado
artesanal de la ciudad encontramos las alfombras. Ya conocidas en
época medieval, los artesanos alcaraceños pronto tuvieron sus
propios telares y sus obras originales, hoy repartidas por los
museos más importantes del mundo. Estas históricas reliquias,
adornaron las nobles casas de Castilla durante varios siglos,
adquiriendo fama en todo el reino. Irremediablemente, siglos y
siglos de tradición están en peligro de desaparecer, pero se han
concedido ayudas para recuperar y promocionar esta singular
industria que antiguamente dotó de identidad a
Alcaraz.
Entre otras
curiosidades, es de reseñar que en el cementerio de la villa
permanecen los restos de "El Pernales" y el "Niño de Aharal",
famosos bandoleros que fueron abatidos por la Guardia Civil en la
Sierra de Alcaraz a principios del siglo
XX.
GASTRONOMÍA
Realizar un recorrido
por el casco urbano abre el apetito a cualquiera, por eso es
conveniente degustar la gastronomía típica de Alcaraz.
Antiguamente, la dieta alimenticia estaba basada en los productos
que proporcionaba el cerdo, así como; chorizos, morcillas y lomo de
orza entre otros. Con el paso de los años, el cordero ha
adquirido importancia, y es recomendable comerlo a la brasa. Dicen
los lugareños que las perdices en escabeche son de las de
"chuparse los dedos". El conejo al ajillo, las codornices, las
liebres, el estofado de jabalí o ciervo denotan la importancia de
la caza en el arte culinario alcaraceño. Y el archiconocido
gazpacho manchego, aquí lo suelen comer con una fina torta que
envuelve a la carne, y aquí lo llaman galianos. Menús de antaño
como las "migas" o el "ajo harina" mantenían calientes los cuerpos
en los fríos inviernos de Alcaraz, hoy, la sencillez de estos
platos los hacen auténticos manjares. Son característicos también
los espárragos trigueros o las setas. Y todos estos alimentos, se
dice que toman un sabor extraordinario gracias al aceite de oliva
virgen cultivado y elaborado en las almazaras de la Sierra de
Alcaraz.
Para finalizar la comida
con sabor dulce que mejor que degustar unas hojuelas fritas, entre
otros de sobremesa como los panecillos dulces, los suspiros o los
mantecados.
Fuente: Información
www.alcaraz.es y fotografías
propias
|