DESCRIPCIÓN DE LA FÁBRICA DE PAPEL DE FUMAR.
La fábrica fue fundada en el año 1857 por el alcoyano Juan Antonio Borrachina y era propiedad del candelariense Juan Berguío Muñoz. En ella se fabricaba papel de fumar de hilo a partir de trapos viejos. Se eligió esta ubicación, junto al cauce del arroyo del Barquillo, por la pureza del agua, que es un factor fundamental para manufacturar este tipo de papel. Los libritos se comercializaron bajo los nombres de “El Choricero” o “El Barquillo”.
En origen, estuvo formada por cuatro edificios que se suceden a lo largo de la ladera. Actualmente, el acceso es difícil debido a que la maleza, el musgo y los árboles ha invadido totalmente el lugar. Aún así, todavía puede verse en el dintel del edificio principal las iniciales del empresario (JBM) y el año en que se hizo (1857). A esta fábrica vino como técnico, procedente de Onteniente, José Francés Fabra, cuyos descendientes siguen viviendo en Béjar. Esta fábrica dejó de funcionar algo antes de 1900.
A pesar de estar en ruinas aún se ven las pilas hechas en piedra donde se hacía la pasta de papel. Las más grandes, una entera y la mitad de otra, son de tipo holandés y servían para romper el tejido con el que posteriomente se hacía el papel de fumar de hilo, no de arroz. Hay que tener mucho cuidado en la zona porque hay algunas piedras que se mueven y huecos en el suelo dónde iba la noria de agua que movía la pasta de papel. También hay que tener cuidado de preservar todos los elementos de estos edificios.
Antes de abandonar la zona, se recomienda bajar hasta el cauce del río El Barquillo y ver su confluencia con Cuerpo de Hombre, disfrutando de este paseo por la naturaleza.
CÓMO LLEGAR HASTA EL CACHE.
Partimos desde la entrada de la finca de “La Canaleja” de coordenadas 40º 22,886’ N 5º 44,481’ W (Fig. 1: Entrada a la finca de “La Canaleja”), situada en el paraje de “Mario Emilio” o “Los Pinos”. Para los que vengan en coche o moto se recomienda dejarlo en el pueblo de Palomares o en una pequeña explanada antes de “La Canaleja” donde no se interrumpe ningún camino (coordenadas 40º 23,024’ N 5º 44,595’ W).
Esta finca es de propiedad privada así que se debe coger el camino que sale a la izquierda, que está señalado como ruta en un poste de madera (Fig.2: Entrada al camino lateral). El primer tramo del camino es bastante sombrío y en algunas épocas de año puede haber agua, pero sólo en los primeros metros.
Continuar por el camino durante un km aproximadamente, rodeando el muro de la finca de “La Canaleja”. Al comenzar la bajada el camino se divide en varios que más adelante se unen de nuevo. Este es el camino de Candelario, de él sale el camino de la fábrica de papel cuya entrada está marcada a derecha con monolito de piedras, en las coordenadas 40º 22,471’ N 5º 44,661’ W (Fig. 3: Entrada al camino de la fábrica). Este camino es más estrecho en el primer tramo pero luego se ensancha. En su recorrido se pueden ver algunas estructuras como la regadera que abastecía de agua a la fábrica.
Continuar durante unos 400 metros por este camino. Hay varios obstáculos que salvar, lo que dificulta ir en bicicleta, pero nada que no se pueda saltar (Fig. 4: Camino de la fábrica).
Los primeros edificios de la fábrica de papel se ven a la izquierda del camino, pero se recomienda continuar unos 50 m más hasta las coordenadas N 40º 22,500' W 5º 44,883' y girar a la izquierda porque el acceso es mucho mejor (Fig. 5: Acceso a la fábrica desde el camino).
El caché está ubicado en un lugar dónde no se puedan modificar ni estropear las estructuras ya bastante ruinosas de la fábrica. Además, es un lugar de acceso sencillo para evitar accidentes y que los niños puedan buscarlo sin problemas. Las coordenadas del caché son 40º 22,484’ N 5º 44,884’ W.
Se recomienda visitar todas las estructuras de piedra de la fábrica, entre las que destacan las pilas pequeñas, las pilas holandesas, entrada principal, los arcos de piedra,... Hay que tener mucho cuidado al caminar porque algunas piedras se mueven o pueden ser resvaladizas y también hay huecos en el suelo.