Se encuentra al sur de Valencina y posee un largo corredor que culmina en una cámara circular donde resalta especialmente la localización de un monolito de piedra de gran tamaño interpretado como pila o mesa de ofrendas
El conjunto megalítico de Valencina de la Concepción (Sevilla)
En el extremo norte de la cornisa del Aljarafe sevillano y asomando a la vega del río Guadalquivir, se localiza un extenso yacimiento arqueológico correspondiente a la edad del cobre y el bronce antiguo, considerado como verdadero núcleo capital de su época.
La importancia de este valioso patrimonio cultural se subraya por los magníficos monumentos funerarios conservados (dólmenes), por las construcciones vinculadas a las actividades cotidianas de sus habitantes (cabañas, silos, fosos, etc.) y por los objetos y útiles asociados que nos acercan a la vida de unos hombres y al paisaje de hace unos 4.000 años.
En Valencina se conoce un importante conjunto megalítico de construcciones definidas como Tholoi. Se trata de recintos funerarios de distintas dimensiones, realizados para acoger a varios difuntos que se disponen tanto en la cámara como en el corredor de estas tumbas colectivas.
De entre ellos resaltan por su singularidad algunos monumentos que destacan en el paisaje por la presencia de cúspides del terreno (túmulos) que cubren estructuras de varias decenas de metros, como por ejemplo la Pastora, Matarrubilla, Ontiveros o Montelirio.

Acceso al Dólmen de Matarrubilla
El Dolmen de Matarrubilla
Como estructura funeraria de corredor y cámara circular con un total de 32 metros de longitud máxima, Matarrubilla se aproxima a La Pastora en grandiosidad. De ella se diferencia fundamentalmente por que en la cámara se encuentra un gran bloque de mármol negro, tallado y con un rebaje de varios centímetros en la parte superior, que probablemente cumplió funciones de mesa de ofrendas o altar. Sin duda se trata de un elemento ritual que ya tuvo gran importancia en el diseño y planeamiento del monumento, ya que su colocación, ocupando gran parte del espacio de la cámara, debió producirse antes de la erección de la techumbre en falsa cúpula.

El depósito funerario encontrado en Matarrubilla era bastante escaso. En la expoliada cámara apenas se identificaron restos revueltos y fragmentados de cerámica y algunos huesos humanos. En el corredor, Carriazo pudo identificar algunos materiales in situ, incluyendo herramientas de piedra, una gran cantidad de fragmentos de laminillas de oro, algunos objetos de marfil (incluyendo un colmillo de elefante en bruto, sin trabajar) y varios miles de cuentas de collar. Tan solo se encontró un esqueleto completo, a medio camino del corredor y en posición encogida. La cantidad relativamente baja de enterramientos y ajuares y la presencia de la pila o mesa de ofrendas que domina de forma tan evidente el espacio disponible en la cámara abovedada del monumento sugiere que, efectivamente, un monumento como Matarrubilla pudo haber desempeñado la función de templo o recinto ceremonial además de (o quizás más que como) sepulcro.
Para visitar el dolmen.
Hay que pedir cita en el Ayuntamiento de Valencina, en cuya Casa de la Cultura hay un pequeño museo donde se exponen algunas de las piezas encontradas en el municipio.
Los datos de contacto son:
Ojo de Halcón