Entre el Rio Chico y el chozo de la dehesa, se atraviesan unas bonitas praderas donde vamos viendo continuamente de frente toda la cara sur del majestuoso espigüete. El rey de la zona.
A mano izquierda de la pradera que vamos atravesando hay un árbol que destaca entre las escobas. Ahi nos tenemos que dirigir. Es nuestro objetivo.
Contenedor pequeño con varios juguetes para intercambiar.