El Plantío es la zona verde de Soto de Cerrato por excelencia. Situado a apenas un kilómetro del casco urbano, este terreno poblado por ancestrales mochas, que no son sino árboles redondeados en las ramas y la copa, ha protagonizado a lo largo del tiempo, desde bailes y comidas campestres con los que celebrar el Patrón en fiestas, hasta todo tipo de competiciones deportivas -siempre ha sido utilizado como improvisado campo de fútbol- convirtiendose con el buen tiempo en camping libre al servicio de numerosos campistas.
Cercano al río, que le hace estar inundado en ocasiones en épocas lluviosas, este terreno ha permanecido invariable a lo largo del tiempo, gracias a su condición de descansadero de ganado de la vía pecuaria que lo atraviesa.
Este terreno es respetado como pulmón verde del municipio de Soto de Cerrato, y reservado para uso y disfrute de sus habitantes, que encuentran en este paraje un lugar tranquilo en el que olvidarse de sus preocupaciones.
En cuanto a su nombre, poco se puede decir, salvo que se refiere a un conjunto de vegetales plantados recientemente en un lugar. El hecho de que en antiguos documentos cartográficos ya hubiera anotaciones sobre este lugar, hace pensar que en algún tiempo, y por su proximidad tanto a los huertos del municipio como al río, este lugar estuvo dedicado, en parte,a la horticultura.
Destacan en este lugar un buen puñado de mochas centenarias, muchas de ellas con sus troncos huecos, que los niños suelen usar como escondites en sus juegos.