Llegamos por el camino de ribera a un arbol muy especial en el pueblo.
Es simplemente un chopo, pero como es el chopo!!!
En su día cayo derribado por el aire, pero las raices siguieron introducidas en tierra para alimentar al chopo. Y sobrevive inclinado con todas sus ramas buscando el sol como nuevos arboles erguidos de nuevo. Espectacular de ver.