El tranco o salto del diablo, es un conjunto de roquedos graníticos, en estas tierras llamados canchales, de disposición vertical, situados en ambas orillas del río Cuerpo de Hombre. 
La leyenda cuenta que por este lugar, el diablo saltó para cruzar el río y se dejó una de sus botas en la orilla izquierda, quedando petrificada. Desde la misma carretera se accede a la parta superior de los roquedos y el tajo del río queda a los pies, aguas abajo se divisan las minicentrales hidroeléctricas construidas sobre otras mas antiguas y que tienen acceso desde la carretera, a escasa distancia. Por el fondo del barranco, camina y ahonda el Río cuerpo de Hombre, la bajada al cauce aporta nuevas y espectaculares vistas. A los pies del caché hay vías de escalada y en sus alrededores, muy cerca pasa la calzada romana Vía de la Plata, junto a ella se encuentra la casa de la vega, que fuera pabellón de caza de los duques de Béjar y el molino del Fraile y Navarredonda. En este último vivió don Francés de Zúñiga, afamado bufón de Carlos I, el emperador, que terminó muriendo apuñalado por noble mandato debido a sus cantares satíricos. El caché es un tuper que y contiene el log, anilla Toro Rosso, tríptico Geocaching, bolsa de tela Mitsibishi Electric, pelota de espuma Trox, banda reflectante de club de BTT Biciglotones, pulsera Daikin, cuelga móvil Jones Lang, bolígrafos de varios colores, CD de la marcha 101 Km de la Legión de Ronda (Málaga) edición de 2005, balón de playa de Repsol Dani Pedrosa, pegatinas de Covadonga, Linux Albacete y Bike a Fondo, separadores de libros de turismo de León y Fundación Camino de la Lengua Castellana, calendario 2009 Soria, , pelota de golf traída del Mirador de Villatoro GCM10K y un kit básico TRASH OUT. Los datos descritos se han obtenido de la página web www.i-bejar.com.