Hace veinte años este mes, la comunidad geocaching aprendió sobre el Proyecto A.P.E., una promoción patrocinada por la 20th Century Fox con la finalidad de generar interés en su película taquillera del verano: El Planeta de los Simios. La audiencia objetivo de la promoción: los geocachers.

El geocaching apenas tenía un año de vida en aquel momento y fue justo el el comienzo para ser más conocido. El trasfondo de la promoción, que en realidad no tenía nada que ver con la película, era que un grupo de humanos renegados había escondido artefactos (geocachés) por todo el mundo en un esfuerzo de revelar una Evolución Primate Alternativa.

Durante varias semanas de 2001, se publicó una serie de 14 geocachés A.P.E. en Estados Unidos, Brasil, Japón, Australia y el Reino Unido. Los geocachers de cada zona ayudaron escondiendo los cachés. En la web Project A.P.E fueron publicadas una serie de pistas para cada escondite hasta que las coordenadas finales fueron reveladas. Entonces, se produjo una carrera para encontrar cada caché pues contenía regalos promocionales de la película El Planeta de los Simios y otros objetos de intercambio. Un cache incluso contenía entradas para el estreno de la película en la ciudad de Nueva York.

La mayoría de los cachés A.P.E. duraron unas pocas semanas o algunos pocos años antes de que fueran archivados. Actualmente, solo dos quedan activos: Mission 4: Southern Bowl en Brasil y Mission 9: Tunnel of Light en el estado de Washington. (Lee sobre el redescubrimiento de Mission 9 en 2017 aquí.)

Mientras que muchas promociones de geocaching han ido apareciendo y desapareciendo, Project A.P.E. continúa siendo capítulo en la historia del juego. Esto se debe, sin duda, al icono asociado a los cachés A.P.E. Para muchos geocachers, el encontrar un A.P.E. caché en Brasil o en el estado de Washington está en la lista de sus deseos.

El cofundador del Geocaching HQ Jeremy Irish trabajó de cerca en el Proyecto A.P.E. y compartió algunos recuerdos en el 20 aniversario.

¿Qué recuerdas sobre la manera en la que la 20th Century Fox te presentó la idea del Proyecto A.P.E.?

Scott Sandborn, el vicepresidente de una agencia de publicidad llamada i-traffic, se puso en contacto conmigo extraoficialmente por email. Ellos representaban a la 20th Century Fox y tenían la idea de crear una promoción para “el próximo lanzamiento taquillero de una película.” En aquel tiempo ellos estaban interesados en una tormenta de ideas que fuese ventajosa tanto para el geocaching como para la promoción de la película de una manera novedosa. Era en los comienzos de los juegos de realidad alternativa, en el momento en el que salíó la promoción The Beast de la película A.I. Inteligencia Artificial.

¿Te propusieron un plan detallado o tuviste que desarrollar algo de la nada?

Fue hace más de 20 años, así que no recuerdo exactamente lo detallado de sus ideas, pero ellos vinieron con la idea básica del Proyecto A.P.E. La colaboración fue en gran medida sobre la ejecución del proyecto de tal modo que no fuese demasiado promocional sino que fuese más sobre la mejora del geocaching.

¿Cuáles fueron tus objetivos para el HQ y el geocaching?

Esto era una oportunidad no solo para mostrar el geocaching al mundo sino también para proporcionar una actividad lúdica a aquellos que ya lo practicaban, a la vez que no se convertía en demasiado comercial. El aspecto comercial era el que más nos preocupaba porque queríamos asegurarnos de que el juego no perseguía ninguna agenda particular. Realmente, la promoción del Proyecto A.P.E. no hace una referencia directa a la película de El Planeta de los Simios.

Desde el punto de vista técnico en Geocaching.com, ¿cómo fue de complicado el proyecto?

Al crear los primeros tipos de cachés, yo no diseñé realmente la página web de tal modo que fuese fácil el añadir un nuevo tipo de caché. Fue como desenredar las luces de Navidad: los tipos de cachés son la mayor parte del juego y todo está relacionado con ellos.

Por ejemplo, tipos de cachés diferentes tienen tipos de registro diferentes y esas características influyen en los archivos GPX, el formato empleado por diversos dispositivos portátiles. Yo no quería estropear nada cuando la gente se descargara estos tipos de cachés nuevos por lo que tuve que reacondicionar los formatos.

La parte más complicada de la promoción no fue la tecnológica sino la logística: el identificar geocachers por todo el mundo que pudieran obtener permiso de los propietarios de los terrenos y esconder los caché A.P.E. y el enviarles contenedores grandes. Afortunadamente, la agencia de publicidad hizo gran parte del trabajo pesado una vez que determinamos quien escondería los cachés.

¿Cómo se decidió dónde esconder los cachés y quién ayudaría a hacerlo?

Fox eligió las regiones yo consulté la base de datos de geocaching para encontrar a los geocachers más activos en esas regiones por número de encontrados. Contacté personalmente con los geocachers para ver si estarían interesados en el proyecto. Si ellos respondían afirmativamente, yo les presentaba a la agencia para que les enviaran los contenedores con regalos promocionales y otros objetos de intercambio.

En la zona de Seattle fue sencillo. Jon Stanley (Moun10bike) y yo escondimos juntos el caché A.P.E. en el sendero Iron Horse, una de mis caminatas favoritas, con la ayuda del guarda del parque. En realidad, condujimos a través del viejo túnel del ferrocarril para colocar el caché.

Hoy, los caché A.P.E. supervivientes son un destino para muchos jugadores. ¿Podrías haber previsto eso en 2001?

Para ser sincero, no esperaba realmente que la promoción durase más allá del lanzamiento de la película. Como no dañaba nada, decidimos dejar los cachés publicados en la web. Lo cierto es que ser un tipo único de caché atraía a la gente a los cachés.

Pronto nos dimos cuenta que teníamos que crear unas reglas para mantenerlos en la web. Por ejemplo, cada caché A.P.E. tenía que mantener el contenedor original y permanecer en el mismo sitio para ser considerado un caché A.P.E. Supe en algún momento, por diversas razones, que cada caché sería finalmente retirado. Estoy realmente asombrado que dos de ellos estén todavía disponibles.

¿Qué opinas del redescubrimiento del caché A.P.E Mission 9 hace unos años?

¡Fue muy emocionante! Debido al tamaño y al peso del contenedor, siempre dudé que alguien quisiera arrastrarlo a lo largo de un túnel de ferrocarril de 3 millas – 4,8 km – de longitud y estoy contento de que los geocachers hicieran el esfuerzo de rastrearlo.

Recuerdo que hubo muchas discusiones en el HQ sobre cómo reintroducir el cache de tal modo que respetase las reglas originales y el espíritu del juego. Es divertido el ver cómo los cachés A.P.E. cobraron vida por sí mismos más allá de la película. Es uno de mis aspectos favoritos del hobby.

¿Intentaste encontrar cachés del Proyecto A.P.E. en 2001? ¿Has visitado (o esperas visitar) los cachés A.P.E. activos en Brasil o en el estado de Washington? ¡Comparte tus historias en la sección de comentarios!